Durante la época colonial japonesa, alrededor de 400 personas de Corea, que se vieron obligados a ir a la Isla Acorazado («Isla Hashima») a extraer carbón, intentan escapar.
Un virus letal se expande por Corea del Sur, provocando violentos altercados. Los pasajeros de un tren KTX que viaja de Seúl a Busan tendrán que luchar por su supervivencia.